domingo, 11 de octubre de 2020

Tiempo de llegada y de una nueva partida


Acá estoy llegando a mi meta...

Después de muchos meses de trabajo intelectual, de aprendizaje, de descubrimientos, de experimentación, de realizar creaciones con TIC, de pensar mi práctica y de plantear cambios para mejorarla, puedo decir que estoy pisando la línea de llegada. Y estos meses de aprendizaje y reflexión coinciden con el tiempo que llevamos en situación de aislamiento y distanciamiento por el COVID-19.

El ejercicio de pensar "qué me dejó", qué me llamó la atención, qué me movilizó del curso “Evaluación en ambientes digitales” a lo largo de los 5 módulos están reflejadas en las preguntas pensadas para la herramienta “Quizizz”, porque al elaborarlas tuve que retomar lo visto desde la primera clase. De esta forma recuperé ideas centrales y que impactan en mi práctica de la enseñanza, son muchas, pero destaco las siguientes:

  • La concepción de la evaluación para aprender y la evaluación de las competencias y desempeños. El uso de instrumentos específicos como el portafolios digital. La redacción de consignas auténticas considerando su estructura y como este calificativo de “auténticas” tiene que ver con la vinculación con situaciones reales, cuanto más próximas a la realidad, una consigna se vuelve más potente para resolver distintas situaciones con la información aprendida. 
  • La evaluación para el aprendizaje por medio de la retroalimentación formativa. El uso de distintos protocolos, pero no sólo desde una perspectiva externa o de heteroevaluación sino como coevaluación o evaluación entre pares. 
  • Cómo obtener evidencias de aprendizaje en función de lo que se quiere evaluar: si saberes, procesos o productos. El uso de las rúbricas y las rúbricas holísticas.
  • Las múltiples dimensiones de la evaluación me pareció un tema interesantísimo, porque actualiza y ordena aspectos que ya sabía de la evaluación pero desde una mirada más actual, así  las preposiciones de la evaluación: del, para, como y desde el aprendizaje me permitió entender la propuesta metodológica del este curso y otorgar un nuevo significado a cada una de las experiencias por las que he pasado, tanto aquellas que fueron muy productivas como aquellas en las que se me presentaron dificultades de diversa índole, principalmente las que implicaban el trabajo en equipo.
  • Con respecto a la evaluación mediada con TIC destaco el diseño de las preguntas con distintas finalidades cognitivas: las sencillas, las de comprensión, las genuinas y las metacognitivas (relacionadas con las preguntas de la retroalimentación vistas en el módulo 2). 
  • Por último, y no menos importante, el uso de la evaluación mediada por TIC para generar diversión, entretenimiento y humor como una forma de atenuar la formalidad implícita que suele llevar la práctica de la evaluación. La gamificación permite entusiasmar, motivar y premiar a los estudiantes. Sorprendente trabajar con los video-cuestionarios, los formularios y las herramientas de gamificación. 

En la actividad 9 del Módulo 5, al reformular un examen parcial aplicado durante el cursado de Política Educativa me permitió ver esta tensión entre expectativa-realidad. La realidad era bastante “cruel”: sucesión de preguntas sencillas y de comprensión memorística. Pero, al transformar esas preguntas en consignas genuinas, auténticas y metacognitivas comprendí lo limitado que puede ser el instrumento usado si no se lo diseña con más flexibilidad y creatividad.  A continuación, dejo el enlace al formulario de Google transformado en cuestionario: parcial de política educativa

Para los que quieran atreverse a repasar algunos temas de este curso comparto el enlace al cuestionario de “Quizizz”. El enlace para participar es: Evaluación en tiempo de no presencialidad o ingresar a  https://quizizz.com/join?gc=02300656 y colocar el código 02300656

Finalmente, retomando el primer párrafo de este Blog, me voy con esta reflexión: “puedo decir que estoy pisando la línea de llegada, pero cada llegada se transforma en un punto de partida… Tanto los profesores de los cinco cursos, como los tutores que me acompañaron hicieron un excelente trabajo conmigo: enseñaron, mostraron, demostraron, acompañaron, aconsejaron, sostuvieron y motivaron. Me toca seguir sola en este camino de la enseñanza, mi mochila, al empezar estaba casi vacía, hoy está cargadísima de ideas, saberes y herramientas que no pesan ni ocupan lugar. Desde ahora todo depende de mí”.

Pero lo que pensaba que era llegada, se transformó 
en una nueva oportunidad para partir...


sábado, 3 de octubre de 2020

Del, para y desde: preposiciones que posicionan

 


El  curso “evaluación en ambientes digitales” viene planteando una serie de preguntas o interrogantes que se han transformado en verdaderos desafíos prácticos que, para resolverlos, no sólo debí apelar a saberes didácticos y pedagógicos, sino, también, a saberes instrumentales adquiridos a lo largo del cursado de los cinco cursos que componen esta capacitación.

Particularmente, “¿cómo debe ser la evaluación?, ¿con qué instrumentos?”, siguiendo por: “¿para qué evaluar?”, continuando por: “¿qué evalúo?” y llegando hasta: “¿quiénes evalúan?” han resultado ser preguntas movilizadoras que me invitan a reflexionar, modificar y mejorar la propuesta de evaluación, especialmente en este tiempo de no presencialidad.

Preguntas que me llevan a pensar en: la imagen ideal que tengo de la evaluación y la relación de coherencia y adecuación con los instrumentos; los objetivos de la evaluación; los resultados concretos de aprendizaje en los que haré foco. Hasta acá parece muy potente la perspectiva de la evaluación del aprendizaje, pero desarrollada desde la exterioridad del proceso, es decir, desde la heteroevaluación o evaluación externa. Sin embargo, en el módulo 3, al trabajar las consignas potentes y la retroalimentación formativa (con sus posibles protocolos), la evaluación deja de pensarse exclusivamente desde el “afuera” del proceso de aprendizaje, el docente, es decir yo, comienzo a implicarme, comprometerme y participar como orientador de procesos, así llego a esta segunda perspectiva que es la evaluación para el aprendizaje. Pero, finalmente, la última pregunta: ¿quiénes evalúan? me obliga a reflexionar e incorporar nuevos actores en este proceso, que no es ni más ni menos, que el propio protagonista: el estudiante que aprende y que aprende con otros. Así se completa la secuencia llegando a la tercera perspectiva que es la de la evaluación desde el aprendizaje.

De esta forma puedo pensar una secuencia completa del proceso evaluativo: evaluación del, evaluación para y evaluación desde. Estas preposiciones, dan un sentido superador a este proceso tal como lo vengo desarrollando como decente. Implican movimiento, continuidad, pasaje. La práctica y la experiencia me hacen pensar primero en el “del” (sobre todo cuando planifico) el desafío es como pasar del “del” al “para” y como esta última instancia se complementa cuando paso al “desde”. A su vez, el “desde” puede llevarme nuevamente al “del” y al “para” en distintos órdenes. Y así sucesivamente. ¡Tan rica y compleja es la práctica de la enseñanza como la del aprendizaje!

Lo interesante de esta parte del curso, además, es que la evaluación desde el aprendizaje, me lleva a proponerla, pero desde los “zapatos o zapatillas” del estudiante. Porque el podrá, no sólo valorar, apreciar y hasta proponerse aspectos concretos que mejoran su aprendizaje, sino también a hacerlo con sus compañeros, así de la autoevaluación podrá pasar por la coevaluación. En definitiva, distintos protagonistas: docente, estudiante y grupo ejerciendo el mismo rol. Resulta muy potente y completa esta forma de valorar aprendizajes.

Respecto de la actividad 7 del Módulo 4, no tuve dificultades para la elaboración de la rúbrica, que la diseñé pensando en un complemento de la evaluación propuesta en el Módulo 1. Las dificultades se me presentaron en el aspecto técnico, como transformar el complemento CoRubrics en un formulario Google, dificultad que pude superar desde lo técnico, parte con la ayuda de mi tutora Elisabeth Barroso y parte por descubrimiento.

Llegado el momento de hacer la retroalimentación observé en el padlet que a una docente se le presentó la misma dificultad técnica que tuve: transformar la hoja de cálculo en un formulario Google. Aplicando la escalera de Wilson, le sugerí el cambio de su presentación y le brindé las orientaciones para que pueda resolver este tema.

Posibles efectos de la coevaluación:

Autoevaluarme... está bien lo puedo hacer, 
pero ¿a quién se le ocurrió eso de la coevaluación?

Creí que eras mi compañero... 
¡cómo pudiste decir esas cosas de mi producción!

Ya sé lo que opinaste de mi trabajo en la coevaluación
siempre hago las cosas bien...

¡Pongamos todo precioso así aprobamos!

Ojo chicos... 
¡si hacen eso no serviría para nada la coevaluación!

Tiempo de llegada y de una nueva partida

Acá estoy llegando a mi meta... Después de muchos meses de trabajo intelectual, de aprendizaje, de descubrimientos, de experimentación, de r...